5 pautas para educar emocionalmente
Existen algunos aspectos que son básicos a tener en cuenta cuando hablamos de la educación emocional en los niños. Debemos pues, conocerlos y reforzarlos en la medida de lo posible.
Comunicación asertiva con niños
- Para llevarla a cabo podemos utilizar un lenguaje positivo hacia nuestro hijo, demostrándole también que le prestamos atención y respondiendo a sus preguntas.
- Para ello también debemos de utilizar un vocabulario adaptado a su edad, cerciorarnos de que comprende lo que le decimos.
- Tratar de evitar la mentira pero también evitar la sobreinformación.
Conexión emocional
- Es la base de una crianza sólida, coherente, basada en el amor y el respeto.
- Atender a sus necesidades, tanto emocionales como físicas, personales, etc.
- Alimentar cada día el vínculo padre/madre-hijo.
Modelos positivos
- Los papás y las mamás sois los espejos en los que se miran vuestros hijos.
- Importancia de ser modelos de referencia para ellos.
- Intentar en la medida de lo posible, no proyectarles nuestras preocupaciones
- Mantener la calma.
- Transmitir seguridad.
Una de las cuestiones que más se nos puede hacer cuesta arriba es el hecho de educar emocionalmente.
Por eso, os dejamos a continuación el método 5A de educación emocional propuesto por Judith Franch, fundadora de la página web «Club Peques Lectores´´ un espacio lleno de valores, pasión por la lectura y muchas historias bonitas para contar a los más pequeños.
5 pautas para educar emocionalmente:
– ACEPTAR las emociones de nuestros hijos, sin juzgar la razón o la intensidad.
Debemos aceptar cómo se sienten porque sus emociones son reales, sinceras y muy intensas. La empatía es un elemento indispensable en este primer paso.
– ANALIZAR por qué se siente así.
La razón de por qué se siente así nos ayuda a comprender lo ocurrido. Atender primero a la emoción y después al comportamiento favorece una mayor regulación emocional.
– ABRAZAR para conectar emocionalmente con él o ella.
Valida y normaliza sus emociones. Es importante que sienta que le entiendes y lo apoyas. El abrazo favorece la conexión emocional.
– ACOMPAÑAR en el proceso emotivo ayudando a expresar cómo se siente.
En ocasiones tratamos de cortar la expresión emotiva de nuestro hijo con la intención de que deje de llorar o patalear, en lugar de eso, debemos dejar el tiempo y el lugar necesario para que se exprese.
– APRENDER juntos de la situación vivida, dialogando.
Cuando la situación se haya calmado, es momento de hablar con el niño de lo que ha pasado, de cómo se sintió y por qué. Importante utilizar un tono comprensivo que no inflinja culpa o vergüenza.
Estos son 5 pequeños pasos que podemos seguir para tener en cuenta las emociones de nuestros hijos en una situación de «pataleta´´ por ejemplo.
Podemos aprender mucho de nuestras emociones y de las de nuestros hijos si aprendemos a gestionarlas y aceptarlas.