Cómo preparar la vuelta al cole post-Covid (parte 1)
En estos momentos nuestras vidas han cambiado, no descubro nada nuevo diciéndolo. No obstante, a día de hoy seguimos planteándonos preguntas, como por ejemplo que, sin periodo de adaptación previo, ¿cómo hacemos con los niños y niñas cuando empiezan una nueva etapa en su vida como la vuelta al cole?
Nos gustaría hacer esta reflexión para que, el inicio del próximo curso escolar 2020-2021, con todos los cambios que estamos teniendo, sea lo más normalizado posible para nuestras niñas y niños.
Los padres y madres somos los encargados de que nuestros hijos e hijas comiencen el curso escolar con la mayor tranquilidad y seguridad en sus propias capacidades, trasmitiéndoles siempre el sentimiento de acompañamiento a la vez que van creciendo y haciéndose adultos responsables y autónomos.
No todas las familias han vivido el confinamiento con el mismo escenario, cada una sabe a lo que se ha enfrentado y cómo lo ha podido solventar. Pero esto no quita para intentar que los más pequeños y pequeñas de la casa puedan ir retomando una normalidad lo mas efectiva y afectiva posible.
“Está claro que aquellos niños en cuyas casas se han vivido momentos de angustia y ansiedad, aunque los padres y madres lo hayan intentado ocultar o disimular, los menores lo han vivenciado», pues “la ansiedad y angustia de los padres se contagia” como dice Vicenç Arnaiz.
Pero, como padres y madres, es nuestra obligación ayudar a los niños y niñas a comprender cómo se verá todo y qué se va a esperar de su comportamiento en el próximo septiembre. Aunque parezca que falta mucho, con esta anticipación disminuirán su angustia y ansiedad.
Ante la vuelta al colegio, es previsible que los niños y niñas experimenten una variedad de emociones, desde felicidad y alivio hasta ansiedad, miedo y enfado. Las actividades dirigidas a promover su reincorporación positiva ayudarán a gestionar las posibles dificultades. De la misma manera, la contribución activa de los más mayores en la organización de su regreso al colegio ayudará a reducir sus inquietudes y miedos.
Todavía tenemos los meses de verano para intentar recomponer la seguridad y tranquilidad en la medida de lo posible y para evitar ese contagio emocional. Con esto quiero decir que los niños y las niñas pueden requerir más atención, tener problemas para dormir y/o en la alimentación y mostrar enfado, tristeza, cansancio o miedos.
¿Es vuestro caso? Podéis poneros en contacto conmigo a través del formulario de contacto.