10 consejos para introducir hábitos de estudio en niños pequeños

Tras nuestro anterior artículo sobre Cómo establecer las bases de los hábitos de estudio en los niños desde el Primer Ciclo de Educación Infantil, hoy compartimos con vosotros 10 recomendaciones para ponerlas en práctica.


En primer lugar, es importante tener claro por qué debemos introducir los hábitos de estudio a estas edades:

  • Porque es más fácil adquirir hábitos cuando se enseñan en las primeras edades. Si desde el inicio ponemos hábitos de estudios, métodos y técnicas y las aplicamos en casa, nos podrá costar menos que nuestros hijos aprendan y sean autónomos. De la misma forma que los padres terminan consiguiendo que el niño se bañe, coma, etc., solo, aunque cueste su tiempo lograr ese objetivo, todo tiene su tiempo de aprendizaje.
  • Para acostumbrar a los niños desde pequeños a tener su hora de estudio. Los niños están escolarizados durante muchos años. Tengamos en cuenta que estudiar es lo que va a realizar durante casi 16 – 18 años, o incluso más, así que es mejor aprender a estudiar desde pequeños e ir adaptando el método a las nuevas capacidades y necesidades del niño/alumno que enseñarle a mitad de la escolarización.
  • Porque acostumbran a los niños a sistematizar y ordenar el trabajo desde pequeños al igual que indicamos es la hora de comer, o la hora de dormir, hora de jugar, y preparamos una serie de acciones diferentes para cada actividad.

Recomendaciones:

  • Al preparar el horario de la tarde, incluye siempre en él tiempo para jugar y relajarse, así como también para actividades con rompecabezas, dominós, pinturas, etc.
  • Para realizar actividades intelectuales (ejercicios de memoria, atención, etc.) es preferible ubicarlas en horas que no estén cerca del momento de dormir ni de comer.
  • El lugar donde hace sus tareas debe estar libre de distracciones, y ser adecuado a su tamaño (mesa y silla). Debes cuidar su postura y que sus pies siempre toquen el suelo.
  • Otra manera de diferenciar bien los espacios y momentos de los “deberes”, es separando y guardando materiales como, lápices, pinceles, etc. en un lugar distinto a los objetos que utiliza para jugar.
  • Anima y reconoce positivamente sus logros en cuanto al orden y al esfuerzo.
  • Destacar más el proceso que el resultado, pues esto último varía según cada niño.
  • No encender las pantallas, el televisor, ordenador, tablet, móvil, mientras hace sus tareas, pues son poderosos distractores.
  • Procura que el lugar tenga buena iluminación y ventilación.
  • Marca muy bien las horas de inicio y fin de los tiempos, para que se vaya formando idea del uso que le debe dar a cada uno.
  • Predica el orden dando el ejemplo en casa. Los padres pueden estimular en el niño estas destrezas a través de la lectura o narración de cuentos, juegos con números, canciones, ilustraciones u otros procedimientos que diviertan al niño/a.

No hay que olvidar que en estas edades el juego es un poderoso aliado en el aprendizaje.

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